En este nuevo blog, hablaré sobre Francia. Un país del cual empezamos a vivir desde hace seis meses.
Y como no, voy a relatar de la ciudad más bonita, la que nos acogió desde un principio y del que cada día estamos cada vez más enamorados. Se trata de Landerneau.
Esta ciudad está ubicada en el departamento de Finisterre, la región de la Bretaña Francesa. Cerca de ella, se puede encontrar la gran ciudad de Brest, una de las ciudades bretonas más importantes, junto con Rennes, Vannes y Saint Brieuc.
Esta ciudad cuenta con un gran patrimonio arquitectónico, siendo el más famoso, el reconocido puente de Rohan, que cruza el Elorn. Este es el único puente habitado que queda en Europa actualmente. Siendo totalmente rodeada de viviendas pertenecientes a los siglos XVI al XIX.
Este puente construido en el siglo XVI, cuenta con seis arcos de piedra en agua salada, reemplazando a la antigua construcción de madera del siglo XII. Por otra parte, sus pilares están hechos de granito.
En el año 2011, ganó una distinción al Premio Europa (junto con la ciudad alemana Hünfeld) por los notables esfuerzos para promover el ideal de la unidad europea. Dichos premios son otorgados anualmente por el Consejo de Europa, desde 1955.
Como curiosidad, existe una expresión que nombra a la ciudad: "Esto hará ruido en Landerneau". Su origen tiene en el bullicio, cuya causa eran las burlas hacia las viudas que volvían a casarse con demasiada rapidez. Actualmente, este es el nombre de un festival.
Por otra parte, nuestra experiencia es totalmente grata. Y cada vez que tenemos que visitar esta preciosa ciudad, nos genera un sentimiento indescriptible de puro amor y agradecimiento.
No hay palabras para describir lo agradecidos que estamos de vivir aquí. No solo por los paisajes, sino por la gente amable, un conjunto de todo.
Y todas las nuevas oportunidades que se abrieron en nuestro camino, y, aprovecho, para agradecer a nuestros grandes amigos Ilaria y Adrián (su Instagram es @myvanmyword para quienes no lo conocen). Sin ellos, sin su insistencia, sin el gran cariño que nos tienen a nosotros (como nosotros lo tenemos hacia ellos) no estaríamos aquí, en este momento, en Francia. Por ello, estoy eternamente complacida por su amistad, y que aunque, no tenemos años de esta relación, para mí es como si nos conociéramos de toda una vida. Una última palabra, gracias.
Sin más, finalizo este blog, un poco más sentimental y personal de lo normal, con la siguiente frase relacionada con todo lo que nos ha pasado hasta este momento: "Azar es una palabra vacía de sentido; nada puede existir sin causa" , autor Voltaire.
Excelente!!! Un post muy lindo! Gracias por compartir con nosotros esta aventura 😊
Ohhh que bonito abuela, Precioso como escribes y nosotros súper contentos de tenerlos como amigos en nuestra vida
Precioso el post de hoy ,muy bonito y emotivo . ❤️❤️